viernes, 1 de septiembre de 2006

Autoestigma.


Autoestigma y paranoia y mucho de vos. Tu mirar es tan nocivo, me afecta mal.
Ya tengo más que bastante con mi propia cruz, como para estar cargando la de los otros.
¿Por qué no me dejás en paz? ¿Por qué no te dejás en paz?
Al final de cada día, sólo quedo yo, diciendo frente al espejo siempre lo mismo.
¿Por qué no me dejás en paz? ¿Por qué no te dejás en paz? CIRO PERTUSI.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Danyyy grosaaaa